Alberto Vales, de Johnson Controls
*Alberto Vales Director de la Unidad de Negocio de Control, Fuego y Seguridad (BMS) Johnson Controls

Edificios inteligentes, seguros y saludables para las ciudades del futuro

ciudad conectada

La crisis sanitaria global provocada por la COVID-19 que ha sacudido a la sociedad ha puesto de manifiesto que la protección de la salud y el bienestar de los ciudadanos son ahora, más si cabe, aspectos prioritarios entre los planes y desafíos que deben abordar las denominadas ciudades del futuro. Y la digitalización y conectividad en los edificios inteligentes o smart buildings desempeñan un papel fundamental a la hora de hacer frente a nuevos y complejos retos como la seguridad y protección sanitarias, al mismo tiempo que ofrecen e impulsan otros beneficios como la eficiencia y la sostenibilidad.

El desarrollo de los edificios inteligentes está marcando el futuro de nuestras ciudades y la manera que tenemos de interactuar con la tecnología. Solo en 2022, los smart buildings tendrán 483 millones de dispositivos conectados en todo el mundo. Un aumento anual promedio del 33% respecto a los 151 millones de dispositivos conectados instalados en este sector en 2018, según uno de los últimos informes de Berg Insight.

Un buen ejemplo de la aportación de la digitalización frente a desafíos como la COVID-19 lo podemos encontrar en el desarrollo de soluciones de seguridad integrales como OpenBlue Healthy Buildings, que impulsamos desde Johnson Controls. Este conjunto de tecnologías aplicadas a los edificios hace que los espacios compartidos sean más seguros a medida que las personas acuden nuevamente a sus puestos de trabajo. Protegen y ofrecen confianza a los ocupantes y visitantes de los edificios, minimizando las interrupciones en caso de que surjan positivos por COVID-19 y acelerando la reocupación de los edificios mediante la automatización y optimización de los protocolos de seguridad.

Este tipo de tecnologías y soluciones para la protección integral de los edificios incluyen una combinación de hardware y software, así como equipos inteligentes, sensores digitales, sistemas de seguridad, cámaras, monitores, análisis y paneles de control. Además, también cuentan con una aplicación móvil para gestionar espacios y experiencias de los ocupantes, respetando en todo momento los estándares de privacidad.

Gestión de salud y riesgos sanitarios

La transformación digital de los edificios hace posible que podamos contar con este tipo de herramientas que permiten gestionar aspectos relacionados con la salud y los riesgos sanitarios, brindando numerosos beneficios:

  • El rastreo de contactos. Las capacidades de rastreo automatizado de contactos son un elemento fundamental y permiten la inclusión de otras tecnologías. En general, estas soluciones permiten que la administración del edificio y los managers comprendan los riesgos de exposición para los ocupantes del edificio. En el caso de que una persona resulte positiva, el sistema puede rastrear retroactivamente el contacto dando apoyo casi inmediato a los equipos de Recursos Humanos y Servicios Generales y contactar con los trabajadores en riesgo, ocuparse de las áreas potencialmente afectadas y tomar medidas preventivas para minimizar la propagación. Además, el rastreo de contactos brinda tranquilidad a los empleados en caso de que alguien haya dado positivo.
  • El seguimiento del distanciamiento social. La implementación de soluciones digitales como OpenBlue Healthy Buildings permite monitorizar el distanciamiento social en tiempo real, enviando alertas de infracción en caso de que los ocupantes estén demasiado cerca o los espacios estén muy llenos, lo que permite extraer informes extensos y cambios de comportamiento en tiempo real para evitar contagios.
  • Cámaras térmicas. Para garantizar un enfoque integral de la seguridad, incluyen tecnologías que detectan la temperatura de las personas mientras caminan para permitir entradas y salidas sin contacto y previniendo la propagación de infecciones.
  • Planificación de escenarios. Las soluciones determinan de manera proactiva los contactos entre las personas y los espacios, predicen los impactos de posibles eventos negativos y permiten la intervención antes de la interrupción y reducen el riesgo.
  • Seguimiento de la utilización del espacio. Hace posible observar mapas en vivo del estado de higienización, datos de ocupación y recomendaciones para moverse por el edificio de manera segura con el fin de maximizar y monitorizar el uso de los diversos espacios.
  • Mejora de la comunicación y experiencia. Mediante la aplicación móvil se ayuda a involucrar a los empleados y ocupantes en tiempo real al proporcionar actualizaciones sobre espacios compartidos y nuevas políticas, orientación preferida para evitar áreas concurridas, disponibilidad de espacio y detalles de seguridad, respuesta SOS y soporte de horarios rotativos. Estas funciones permiten aumentar la comunicación entre la administración del edificio, los recursos humanos y los empleados proporcionando información en tiempo real y una mayor transparencia.

Mejorar las estrategias

Gracias a la gestión integral de los sistemas de calefacción, ventilación, aire acondicionado y purificación, propietarios y operadores de edificios pueden desarrollar estrategias para conseguir aumentar la circulación del aire exterior, a través de mejores opciones de filtración para proporcionar una mejor calidad del aire, configuraciones de temperatura óptimas para ralentizar el flujo de patógenos en el aire y el uso de soluciones de iluminación ultravioleta C (UV-C) para matar organismos virales.

Incluso antes del estallido de la pandemia de la COVID-19, en el indicador anual de eficiencia energética detectamos y revelamos el deseo de los propietarios y operadores de mantener sus edificios saludables. Indicador que también muestra que existe una demanda de que propietarios y operadores realicen inversiones para hacer que los edificios sean más saludables y habitables.

Además, según constata el último estudio del Instituto de Investigación de Capgemini, Street Smart: Putting the citizen at the center of Smart City initiatives”, para más de la mitad de los españoles (63%) el papel de la tecnología de las ciudades inteligentes es más que importante a la hora de conseguir urbes más sostenibles; estando un 42% dispuesto a pagar más por el acceso a iniciativas de smartcity que les permitan vivir en ciudades más desarrolladas y conectadas.

Y es que a medida que avanzan los edificios, las comunidades y las ciudades, debe impulsarse la trasformación digital para satisfacer las necesidades actuales y estar bien posicionados a la hora de aprovechar las oportunidades del futuro.