Evolución de la gestión a partir de los datos, la automatización y la conectividad (5G)

Máquina, holograma
Leticia Duque

Si habláis con profesionales que lleven más de 30 años trabajando en el sector del Facility Management, y nosotros tenemos la suerte de hacerlo, os explicarán cómo las instalaciones parece que ‘han cobrado vida’ y han tenido un proceso de automatización en estos últimos años.

Antes, los activos eran simples estructuras de cemento y ladrillo que había que gestionar, infraestructuras que cuando se estropeaban había que arreglar, pero en las que no se anticipaba o se preveía nada a largo plazo. Como nos comenta Joaquín Montesinos, CEO de Althea MS, “la llegada de los edificios inteligentes trajo consigo una sinfonía de datos y tecnología. No era solo la automatización de luces o sistemas de climatización; era la capacidad de estos edificios para aprender de nosotros, adaptarse a nuestras necesidades y mejorar nuestras experiencias”.

Hasta llegar a este escenario los profesionales del Facility Management han ido viendo como poco a poco se iba introduciendo esa tecnología, que cada vez hacía de verdad más ‘inteligente’ al edificio.

Ahora, estamos en el año 2023, y el salto, si miramos hacia atrás es enorme. La automatización, los datos o la conectividad 5G son una revolución.

Conectividad 5G

La conectividad 5G está revolucionando las redes de telefonía móvil. Como indica su nombre es la quinta generación de tecnología de comunicación inalámbrica, con una capacidad de velocidad de transmisión de datos muchísimo mayor que sus predecesores. Permite superar los 10 gigabits por segundo, y la capacidad de dispositivos conectados, entre otras cuestiones.

El 5G tiene la capacidad de gestionar millones de dispositivos en tiempo real, lo que supone un gran avance para el desarrollo de los servicios, como por ejemplo el control remoto de múltiples dispositivos a la vez en el tiempo; que además están mandando datos que el Facility Manager analizará para tomar las mejores decisiones sobre el servicio, para hacerlo lo más óptimo y eficiente posible.

En la actualidad, es sencillo conectar miles de dispositivos en los edificios, y por lo tanto obtener datos en tiempo real.

Los humanos seguirán siendo relevantes, ya se habla de la insustituible intuición, empatía y agilidad física y mental de los humanos que nunca podrá tener la tecnología

Automatización

La automatización consiste en utilizar las tecnologías para que éstas realicen de manera autónoma ciertas tareas muy repetitivas sin la intervención humana. La automatización busca liberar a las personas de ciertos trabajos para que puedan desarrollar su talento en asuntos mucho más relevantes.

En el sector del Facility Management está superado el debate sobre si la tecnología quita puestos de trabajo. Pues la automatización supone que estos profesionales sean mucho más eficientes y dispongan de todos los recursos para gestionar las infraestructuras y la tecnología poniendo en el centro a las personas.

Gracias a la automatización se consigue mayor productividad, un control más sencillo, que las operaciones se realicen de manera ininterrumpida y mejora la seguridad.

Dentro de los tipos de automatización que existen, queremos destacar por su interés en estos momentos, el de la Inteligencia Artificial, ya que la incorporación de esta tecnología a la automatización significa que las máquinas puedan ‘aprender’ y ‘tomar decisiones’ basándose en situaciones pasadas y analizadas. Los humanos seguirán siendo relevantes, ya se habla de la insustituible intuición, empatía y agilidad física y mental de los humanos que nunca podrá tener la tecnología.

tres dados, uno una persona está cambiando del número 4 al 5, el otro dado tiene la letra G y e otro un símbolo de Wifi.

La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo resalta la importancia de invertir en los próximos siete años en infraestructuras sostenibles

Servicios basados en datos en tiempo real

La obtención de datos en tiempo real ha abierto un sin fin de posibilidades. Conocer qué sucede en cada momento o cómo se comportan las personas en un momento determinado posibilita tomar decisiones mucho más acertadas.

Los dispositivos conectados a esta red 5G, que comentábamos antes, uno de los beneficios que ofrece es la obtención de datos. Por ejemplo, podemos conocer la cantidad de personas que pasan cada día por un centro comercial, e incluso saber en qué horas hay más gente y qué recorrido hacen, o dónde entran, y cuánto tiempo permanecen. Pero esto son solo ejemplos, se podrían medir otros muchos parámetros, en función de los intereses o necesidades, y con el análisis de los datos sacar muchas conclusiones que ayudarán, desde a mejorar las instalaciones hasta a ofrecer nuevos servicios. O ser mucho más eficientes en términos de energía.

El FM ha encontrado una herramienta que puede llevar su gestión a la excelencia.

La llegada de la tecnología está transformando el mundo de los servicios, y lo estamos viendo ya en el control de aforo o la limpieza, por ejemplo.

Otro ejemplo le tenemos en el reciente acuerdo firmado entre CBRE GWS y Future Motors Iberia, gracias al cual la multinacional de servicios de Facility Management y mantenimiento integral podrá acercar a sus clientes y socios motores eléctricos inteligentes con ADN digital que les permitirá reducir el consumo eléctrico de los sistemas de climatización y ventilación (HVAC) de los edificios.

Con la ayuda de un software que incorpora algoritmos de aprendizaje automático y herramientas de big data, “se consiguen ahorros de hasta un 60% en el consumo energético de los sistemas de climatización, logrando periodos de amortización inferiores a los tres años”, aseguran Future Motors (brazo operativo de Turntide Technologies en Europa) y CBRE GWS.

Asimismo, el motor permite reemplazar de forma sencilla los equipos ya existentes en las máquinas y sistemas de climatización y tratamiento de aire, lo que facilita la integración con los sistemas de gestión de edificios (BMS) del cliente.

Actualmente, ya hay grandes cuentas del ecosistema CBRE GWS que han instalado los motores eléctricos inteligentes, con lo que han conseguido ahorros energéticos de hasta el 42% y periodos de amortización “muy positivos”.

De acuerdo con las compañías, esta alianza “contribuirá a acelerar los planes y estrategias de sostenibilidad de numerosas empresas en España”, en los que una de las prioridades es mejorar la eficiencia y la sostenibilidad de los edificios.

La sostenibilidad es precisamente uno de los principales objetivos globales. Todos debemos aportar nuestro ‘granito de arena’, y si la sostenibilidad es buena para el planeta resulta que también lo es para los negocios, porque generalmente supone importantes ahorros económicos, a la par que mejora la reputación e imagen de aquellas compañías frente a las nuevas generaciones, que apuestan por cuidar el medio ambiente y por ende su futuro en el planeta Tierra.

Sobre este aspecto, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) resalta la importancia de invertir en los próximos siete años en infraestructuras sostenibles -e indica que esa inversión puede superar los cuatro billones de dólares-, para cumplir con los objetivos establecidos a nivel internacional.

Para Vicente Redondo, CEO de CBRE GWS en España, “las empresas de mayor dimensión, especialmente las multinacionales, han detectado que un correcto mantenimiento y una apuesta por tecnologías disruptivas en sus edificios son fundamentales para garantizar su futuro”. Además, el directivo subraya el “gran peso” que tienen estas innovaciones “para incrementar tanto la sostenibilidad general de las empresas como en la propia experiencia de los empleados” Joaquín Montesinos, CEO de Althea MS, comenta al respecto con toda esta evolución de la tecnología versus los edificios que, “uno de los aspectos más gratificantes ha sido ver cómo los edificios inteligentes abrazan la sostenibilidad. En un mundo cada vez más consciente del medio ambiente, los edificios inteligentes se convirtieron en pioneros en la eficiencia energética y en ser custodios del medio ambiente”.

Sostenibilidad

 

“Imagínese disponer de una detallada réplica virtual de la ciudad, de parte de ella o de algunos de sus sistemas, como el transporte o la gestión de residuos. A partir de esa información se pueden tomar decisiones en tiempo real”

El FM en el desarrollo de las smart cities

Las ciudades, con la implantación de las nuevas tecnologías, se están convirtiendo en ciudades ‘inteligentes’. Es decir, se trata de un conjunto de infraestructuras, edificios y espacios varios que para distintos aspectos usan la tecnología como herramientas para optimizar su gestión de cara a ser mucho más eficientes en términos de recursos, pero también para mejorar la vida de las personas, sus ciudadanos. Y si estamos hablando de gestión es clave que el Facility Management esté implicado en las ciudades ‘inteligentes’.

En estas ciudades ‘inteligentes’ todos los activos y espacios que la componen podrían enviar datos a la Administración para que pueda desarrollar la mejor de las gestiones. A través de los dispositivos conectados, el IoT, pero también a través de la propia colaboración ciudadana, la gestión de las ciudades podría estar basada en los datos. Y así gestionarla de la mejor manera posible.

El Facility Management es sin duda alguna la figura que debe ayudar a gestionar las ciudades ‘inteligentes’. Desde IFMA España, a través de José Pedro Inestal Muñoz, director del grupo de trabajo de Smart Cities (Comisión Tecnología y Smart Cities), conocemos las principales herramientas que utiliza el Facility Management para gestionar espacios y edificios, que son las unidades que componen las ciudades, y, por lo tanto son herramientas que resultan también interesantes para la gestión de las ciudades y su automatización (en todos sus ejes: gobernanza, movilidad, sostenibilidad, digitalización, infraestructuras, energía, etc).

Estás tecnologías según apunta Inestal son: los sistemas IWMS que permiten hacer simulaciones; sistemas de gestión de mantenimiento que nos ayudan a administrar y optimizar estas tareas, reducir los costes, mejorar la calidad y alargar la vida y la inversión de los edificios; sistemas de gestión ESG (en español, ASG; aspectos medioambientales, sociales y de gobernanza); sistemas BMS que nos permiten saber el comportamiento del edificio, para mejorar la calidad y seguridad del mismo, optimizando costes como los consumos energéticos; BIM; sistemas de IoT que, junto con los BMS, nos permiten integrar toda la información del edificio y su uso, para anticiparnos, evitar problemas y costes; big data e IA

La realidad es que en nuestras ciudades ya tienen esta automatización y se está trabajando con datos y con tecnología disruptiva (IoT, sensórica, IA, etc.). Ya no es un futurible.

José de la UZ Pardos, Alcalde de las Rozas, nos explica que en su municipio y en otras ciudades de la Red de Ciudades Inteligentes Españolas (RECI) -que precisamente preside-, ya se usan gemelos digitales para la gestión de las mismas. “Imagínese disponer de una detallada réplica virtual de la ciudad, de parte de ella o de algunos de sus sistemas, como el transporte o la gestión de residuos. Y que esa réplica se actualizara al segundo, gracias a los datos que recopilan sin cesar los sensores distribuidos por toda la estructura urbana. Eso daría a los gestores públicos datos precisos de lo que ha pasado, lo que está pasando, y, gracias a los análisis con big data e inteligencia artificial, de lo que va a pasar. A partir de esa información se pueden tomar decisiones en tiempo real, o hacer pruebas que solo saldrán del entorno virtual si funcionan. La ganancia en tiempo y eficacia es enorme”.

Los gemelos digitales se pueden usar también en las ciudades para abordar la sostenibilidad; por ejemplo para mejorar la movilidad urbana. Pero también para gestionar los residuos, entre otros servicios.

Un hombre mirando a través de unas gafas de realidad virtual visualizando una ciudad.

Transformación digital de las empresas y sus APP

La gestión inteligente de edificios, espacios y ciudades se puede llevar a cabo gracias a la implantación de soluciones que, a través de una única interfaz común, dan acceso a una plataforma de analítica e inteligencia artificial (IA) integrada con una capa de software de control de gestión de la edificación y con una capa de sensores con los que se recopila la información, lo que facilita el funcionamiento del edificio”, según nos explica Juan Martínez Díaz-Guerra, experto en empresas de Telefónica España.

Martínez insiste en que, “la eficiencia energética y la sostenibilidad son las grandes preocupaciones de las empresas y la Administración”, que son las que han de gestionar estos activos y las ciudades, cumpliendo o adecuándose a los marcos regulatorios y políticas internacionales en esta materia.

En este sentido, “las plataformas de gestión emergen como un pilar esencial del Facility Management. Actúan como facilitadoras, conectando y coordinando transversalmente diversas funciones en tiempo real”, nos asegura Borja Duque, cofundador y director de MoveWORK.

Estas herramientas permiten la colaboración entre los agentes o empresas implicadas en la gestión, se crea un único ecosistema. “Centralizar, planificar, dirigir y seguir todas las actividades de la organización se vuelve más fácil”, prosigue Borja Duque. “Los datos operativos están reunidos en la misma interfaz para establecer correlaciones sensatas. En un vistazo, los administradores obtienen informes de KPI, un seguimiento de las intervenciones en curso y un estado de situación del entorno de trabajo”.

La integración es uno de los grandes avances en el sector, “quienes llevamos años en el mundo del Facility Management sabemos que la integración entre los diferentes sistemas que concurren tanto en servicios generales de cualquier ámbito (industrial, inmobiliario, de salud, de infraestructuras o de ciudades) ha sido uno de los retos más importantes a nivel de TICs”, apunta José María Borda, vicepresidente Ejecutivo de Sisteplant.

Sin este gran salto que han dado las empresas, creando las herramientas adecuadas, logrando hacer realidad los retos que el sector tenía en el horizonte no podríamos estar hoy hablando de que nuestros edificios, infraestructuras, espacios y, por ende, nuestras ciudades se están gestionando ya de manera inteligente, usando datos en tiempo real, anticipándose a las necesidades o problemas, y pensando en hacerlo de una manera mucho más sostenible y eficiente, pero sobre todo en una gestión mucho más humana.

Hombre frente a un ordenador que refleja un análisis.