Tras la aprobación de la nueva Ley de la Vivienda por parte del Congreso y su pronta entrada en vigor, en el sector no dejan de asaltar las dudas. Estas novedosas medidas plantean una serie de posibles consecuencias que podrían afectar al panorama inmobiliaria nacional. Por ello, Abencys, despacho de abogados y economistas, prevé, como principal problema, el alejamiento de los inversores del mercado nacional tras la aprobación de dicha ley.
Entre las áreas que más destacan de la ley se encuentran el establecimiento de las personas jurídicas con más de cinco viviendas en propiedad como grandes propietarios, la protección en desahucios, la ampliación de las zonas tensionadas en el mercado del alquiler, o por ejemplo, el recargo del IBI de un ciento cincuenta por ciento a las viviendas vacías.
Los efectos negativos de la nueva Ley de la Vivienda
En primer lugar, esta nueva Ley va a conducir a una falta de incentivos y, por consiguiente, a un aumento de dificultades para inversores y propietarios dentro del sector inmobiliario. Según los expertos, esto supone la amenaza a la libertad de empresa dentro del mercado, además de ser perjudiciales para la inversión tanto particular como profesional por aminorar la seguridad jurídica.
En este sentido, Carlos Grande, socio de Abencys, explica que si el inversor no tiene incentivo, no hay inversión, y si no hay inversión, no hay vivienda nueva y tampoco hay gasto en las existentes. «Si no hay inversión, no hay actividad económica y se incentiva el desempleo”.
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