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ARTÍCULO TÉCNICO
GESTIÓN DE
Espacios
cios para directivos comienzan a di-
fuminarse entre el resto de los tra-
bajadores y varias empresas están
apostando ya por la eliminación de
despachos unipersonales para los
puestos directivos.
Más interpersonal: las corporaciones
hacia las que avanzamos no dispo-
nen de puestos asignados. Las per-
sonas se mueven libremente en fun-
ción de sus necesidades y estados de
ánimo, lo cuál va a permitir abando-
nar la idea del presentismo para dar
más importancia al trabajo por obje-
tivos y resultados.
Personalización: los espacios deben
estar diseñados a la medida de las
características de la organización y
de las necesidades de cada tipo de
empleado. De nada servirá reinven-
tar un nuevo espacio de trabajo si no
pensamos en las personas que lo van
a ocupar. Hacer al trabajador partí-
cipe de esa cocreación es un buen
punto de partida para sentar las ba-
ses del renacimiento de la oficina.
mentación saludable, aprovechar los
recursos de la naturaleza para conse-
guir espacios más inspiradores…
Democratización del espacio: dotar
al trabajador de un amplio rango de
espacios para elegir dónde y cómo
quiere trabajar en función del tipo de
actividad que esté realizando cada
momento, con independencia de su
posición jerárquica, será la base de la
organización moderna. Desde reu-
niones entre grupos de trabajo, pa-
sando por encuentros informales o
momentos que exijan de privacidad,
concentración o relajación.
Fomento de la tecnología: la tecno-
logía y los datos serán los cimientos
del futuro. Facilitar a los trabajadores
que se relacionen de una forma na-
tural, sencilla y efectiva con la tecno-
logía, permitirá a las empresas avan-
zar hacia el futuro.
Menor jerarquización
:
en las empre-
sas del futuro los equipos tendrán
igual o más peso que los directores,
por eso, las fronteras entre los espa-
jo se convertirán en la pieza clave del
tablero de juego.
Es por esto que las oficinas están
reinventándose para ayudar a los tra-
bajadores a hacer frente a los retos fu-
turos. No sólo se busca que se pue-
da colaborar mejor, sino que el espa-
cio de trabajo se convierta en un ca-
talizador del talento porque gracias a
ese talento las empresas van a hallar
su valor diferencial. Las oficinas de hoy
y del mañana deben poner el foco en
las personas. Ya no vale con crear el
decorado más espectacular y diverti-
do, ubicarse en la mejor zona de la ciu-
dad o contar con la última tecnología;
si la oficina no se hace pensando en las
personas que trabajan en ella, respon-
diendo a sus necesidades de bienestar
físico, emocional y cognitivo, entonces
no cumplirán con su papel de contri-
buir a alcanzar el éxito.
Renovar los espacios
Aunque no existen fórmulas maestras,
porque cada espacio debe adecuarse
a la actividad que se desempeñe en la
empresa, el nuevo planteamiento del
entorno laboral debe volverse más
humano y debe atender a una serie de
criterios:
Flexibilidad: la incertidumbre que im-
plica no saber lo que nos deparará el
futuro nos lleva a pensar en espacios
con una absoluta capacidad de adap-
tación que puedan ser modificados
en función de las necesidades cam-
biantes de las empresas.
Bienestar: mejorar la calidad de vida
en la oficina nos hará no sólo ser más
productivos, sino estar más motiva-
dos y tener un mayor compromiso
con la empresa. Cada vez son más
las empresas que están centrándose
en calificar a sus edificios con la cer-
tificación
Well
, que mide no sólo la
eficiencia energética del edificio, sino
aspectos relacionados con la salud
del trabajador como el mobiliario, la
posibilidad de cambiar de posturas
durante la jornada, incentivar una ali-
El entorno laboral necesita, cada vez más, una
adaptación de los espacios con una carga más
humana